Las preexistencias en términos de seguros de salud hacen referencia a aquellas enfermedades o patologías que ya existían antes de contratar una póliza. Estas preexistencias pueden determinar en muchos casos que la compañía se niegue a asegurar al cliente.

Antes de firmar el contrato, las compañías exigen a los potenciales clientes que rellenen un cuestionario sobre su estado de salud actual.

La pregunta del millón es ¿qué considera – o puede considerar – preexistencia la compañía? Normalmente, las aseguradoras consideran preexistencia una enfermedad diagnosticada por un especialista y cuyos síntomas no hayan pasado desapercibidos. También esta enfermedad ha debido provocar gastos.

Asimismo, también se consideran preexistencias las enfermedades asintomáticas (las que no presentan síntomas). Estas suelen ser las más comunes y también las más polémicas debido a que el asegurado puede desconocer la existencia de la enfermedad.

¿Cuál es el problema con las preexistencias?

Antes de contratar un seguro de salud, casi todas las compañías piden rellenar un cuestionario donde se informa si hay alguna enfermedad y cuál es nuestro estado de salud.

Es aquí donde suelen venir los problemas y donde hay que incidir más. Está terminantemente prohibido mentir en ese cuestionario. Ya sabemos que la tentación inicial puede ser la de esconder o maquillar la verdad, pero NO puedes hacer eso. Principalmente porque no sirve de nada y las consecuencias son más graves. Tarde o temprano se acabará descubriendo (no puedes ocultar por mucho tiempo una preexistencia) y las medidas que tomará la compañía serán mucho peores y más drásticas.

Por eso, el mejor consejo que te podemos dar desde Más que seguro es que seas sincero. No tengas miedo a dar toda la información a la compañía que quieres que te asesore, al fin y al cabo, estamos hablando de nuestra salud, por lo que tenemos que tomárnoslo en serio.

Además, actualmente hay una gran variedad de seguros de salud y lo habitual es que las compañías acepten asegurar al cliente. En el caso de haber preexistencias que puedan resultar demasiado costosas para la compañía, lo que suelen hacer es no cubrir el tratamiento o no completamente (dejan fuera aquellas pruebas más costosas).

Resumiendo: no tienes de qué preocuparte ni debes obsesionarte con las preexistencias. Existen seguros de salud que se adaptan perfectamente a tus necesidades. Tan solo tienes que encontrar el que más te conviene y, sobre todo, ser completamente honesto.

En masqueseguro tenemos una amplia oferta de seguros de salud para que encuentres el tuyo o el de toda la familia. ¡Pregúntanos, estaremos encantados de resolver todas tus dudas!